Este escrito adelanta tres reflexiones cuya coincidencia ha sido forzada para que el encuentro entre ellas, en este texto, tuviera una cierta, sólo una cierta, posibilidad interrelacional, una posibilidad a medio camino entre el error y la verosimilitud. Las tres fueron formulados por primera vez y por separado en mi intervención en el curso de Doctorado de la FADU 2022 dirigido por Roberto Fernandez. Lo que aquí trato, al aceptar su invitación para que “pasara a limpio” ( léase: fuesen emborronados todavía más) aquellos textos, es poder encontrar nuevos entresijos para crear alternativas a las actuales condiciones para el trabajo arquitectónico.
Los tres enunciados tienen que ver en su origen con tres libros que utilicé en el seminario y que abren para mi tres conversaciones centrales acerca del contexto en el que la arquitectura debe desenvolverse. El primero de ellos es El diseño del medio de Keller Easterling ( Bartlebooth. 2021), y su “variación” queer en el texto Glitch de Legacy Russell; en segundo lugar utilicé como referencia los textos que de un modo u otro han situado lo poshumano y lo posnatural como una cuestión central alternativa: More Than-human, un texto editado desde cuatro instituciones ( Het Nieuwe Instituut, Serpentine Galleries, Ofice for Political Innnovation Y Manifesta Foundation ) y tres editores Andres Jaque , Marina Otero y Lucia Pettroiuste con Lisa Mazza, y el texto Emergencias de lo poshumano editado por la Universidad de Alicante 2022; y finalmente, y para poder hablar de las prácticas académicas, utilicé el libro que escribí en 2018 Arquitectura In-Dependiente, el texto en el que explicaba de un modo pormenorizado la experiencia del inicio y el desarrollo de la escuela de Arquitectura en la Universidad e Alicante.
Estas tres notas cubren de algun modo tres aspectos centrales de la actividad arquitectónica. La primera de ellas plantea cómo concebir el paso de la entidad arquitectónica de ser objeto, a ser medio de transformación; la segunda nota abre perspectivas que problematizan de nuevo las relaciones entre cultura y naturaleza tal como están siendo desarrolladas en determinados medios académicos y profesionales; la tercera nota es una aproximación que busca redefinir circularmente el recorrido académico normativizado en la secuencia grado, master, doctorado y actividad profesional.
1. SER OBJETO/SER MEDIO
Cuadro comparativo de once entradas elaborado para poder explicar, a partir del libro de Keller Easterling El diseño del medio, la diferencia entre el diseño de los objetos vs. el diseño del medio en el que interactuarán estos objetos.
DISEÑO DEL OBJETO | DISEÑO DEL MEDIO |
Objetos con nombre para el diseño de cosas. | Propone usar las cosas para diseñar la interacción. El medio habla de renombrar, activar lo ecologizante para valorar e incluir agentes distintos de los habituales. |
Tecnologías sofisticadas, tecnologías digitales de alta sofisticación. | Trata de la sofisticación en los protocolos que organizan la interacción. Acepta que esos protocolos puedan ser redundantes e incluso repetitivos o desordenados. En cualquier caso, esos protocolos pueden tener potenciales que una estructura lineal hace desaparecer. |
Cultura basada en bucles y polarizaciones. Dimensión ontológica de las epistemologías. | Cultura como enmarañamiento y enredo de prácticas solapadas. El medio acepta la cultura de nuestro tiempo, la cultura de un presente continuo, el sistema de interacción en el que se mueven, de un modo natural, las nuevas generaciones. Es una cultura que multiplica los problemas y sus combinaciones entre ellos, valorando así, tanto el problema como su interacción. |
Espacio como categoría formal puesta en juego por el Movimiento Moderno para cualificar una condición ontológica y exclusiva de la arquitectura. | Espacio como medio en el que coinciden, incluso violentamente, (violencia explicita y violencia latente) los distintos agentes políticos: el lugar en el que las dimensiones políticas del cambio climático coinciden con las desregularizaciones neoliberales y las convulsiones provocadas por las migraciones. Mientras el espacio del M. Moderno es un espacio estático y contemplativo, el espacio del medio invita continuamente a sumergirse en sus entresijos y a bucear en él. |
Forma, como invención subjetiva diseñada sobre/desde una tabula rasa. | La forma está en la realidad del encuentro de huellas, y en la manifestación de potenciales y agencias. |
Innovación entendida como fruto del encuentro de formas y espacios. | Diseño como realidad material circulatoria y relacional. Este flujo es la verdadera innovación. La innovación no es ni un objeto ni un sistema: es un protocolo de gestión del medio, una narración cultural que acompaña a la interdependencia de los intercambiadores. |
Disidencia política como estatus exterior a la arquitectura que toma formas de lo moderno normalizado, y que se sitúa siempre en el exterior de las realidades que interviene. | Disidencia política como estrategia de diseño: operamos desde dentro y como participantes de las realidades de las que somos disidentes. Acepta los enunciados de J. Ranciere y el modo cómo éste desmonta la idea de autoridad e introduce la idea de disenso capaz de desestabilizar las señales estéticas que atraviesan la cultura. |
Diseño como sumatorio de novedades que transforma las realidades previas en otras obsoletas, las sustituye por otras, y luego por otras, y así sucesivamente. | Diseño como despliegue de herramientas que permite abrir el presente a ensamblajes alternativos. Puesta en juego de herramientas que atienden a reconsiderar y redefinir los hábitos sociales más que a rediseñar y perfeccionar las herramientas arquitectónicas. |
Explora las realidades sobre las que intervenir desde sus lógicas visibles, y en las ideologías declaradas y normativas. | Basa su activismo en desvelar otras químicas del poder y las realidades no expresadas. El diseño del medio se basa en el supuesto de que no existe un sistema ideológico que lo abarque todo, desde el que se origina toda forma de poder. Y de violencia. En el caso de la arquitectura, los enunciados que dictan aquello que vale y lo que no, lo que es y lo que no es arquitectura. |
Saber qué: mirar a través de expresiones nominativas conocidas (codificadas por la academia) o aproximaciones sofisticadas de lo conocido. | Saber hacer: mirar más allá de ideologías proclamadas para hallar disposiciones no declaradas, sobre todo, de nosotros mismos: el medio se basa en el sentido común o en la memoria muscular, los aspectos prácticos y cotidianos que nacen de gestionar tu entorno con conocimientos técnicos. |
El tiempo como un factor que opera estáticamente. | El tiempo entendido como un presente continuo que se construye y deconstruye en un flujo constante. |
2. NATURALEZAHUMANANATURAL
(Continuación de una reseña sobre una reforma interior de una casa hecha por TAKK, La casa del día después.)
Al escribir sobre esa reforma lo hacía reivindicando, a pesar de lo confuso y controvertido que puede parecer, el término “humano” para cualificar la arquitectura que ellos construían. Lo hacía en estos términos: http://www.torresnadal.com/2022/03/20/notas-para-el-aqui-y-el-ahora-de-la-casa-del-dia-despues-a-proposito-de-la-exposicion-de-takk-la-casa-del-dia-despues-en-la-galeria-h2o-de-barcelona-marzo-2022/ )
Hay muchas arquitecturas que tratan, buscan, o dicen, estar alineadas con este compromiso. Y es loable y necesario. Imprescindible. Lo interesante de LA CASA PARA EL DIA DESPUES de TAKK es que lo logra porque el proyecto acepta que la casa no puede ser de otra manera que tiene que ser “ muy humana”…….. Pero es que empiezo a sospechar que la única posibilidad de explicar el sentido de nuestras trasformaciones arquitectónicas es si somos capaces de explicar ecológicamente nuestros compromisos arquitectónicos desde nuestras potencialidadeshumanas: la construcción de pequeñas realidades de cómo la ecología como texto nos hace hacer ecologías que nos transmutan, alteran, provocan, humillan, ensalzan, abruman, adulan o nos fastidian como la controvertida especie que somos, y que por mucho tiempo vamos a seguir siendo. Y que conste: no estoy en la línea de ensalzar la sencillez. Yo soy de los de antes muerta que sencilla.
Al reivindicar esta condición sé que me estoy oponiendo, a lo que se ha entendido y divulgado como estudios poshumanos e incluso estudios posnaturales. Parecería que mi posición reivindicaría una supremacía de lo humano sobre todo el resto de las actividades y entidades planetarias. No van por ahí los tiros. El diseño del medio, tal como lo entiende Kellen Easterling no distingue entre naturalezas ni entre inteligencias. El medio acepta las limitaciones y los potenciales de todas ellas. De hecho, no le interesa ninguna de estas categorías en sí, al considerar que tanto unas como otras acaban reproduciendo las normativas que tratan de eludir. Lo que nos interesa, y traté de explicar en el texto sobre La casa del día después, es la presencia operativa e interrelacional de ese fluir de energías e interdependencias, colisionando continuamente entre sí. Si aceptamos que lo vivo es un continuo proceso de reencarnaciones, migraciones y asociaciones, en este momento estaríamos en condiciones de aceptar la permeabilidad de lo humano hacia lo natural y viceversa. Esa propuesta de equivalencia no borra los procesos de colonización y abuso cometidos por lo humano, ni sobre la naturaleza, ni sobre las otras especies, ni sobre la propia naturaleza. La denuncia tiene que seguir. La construcción de nuevas epistemologías también. El tratamiento de todo lo no humano en su condición subalterna de lo humano está ahí, y debe ser explícitamente denunciado y desmontado. Pero del mismo modo que hemos sido capaces de distinguir unos comportamientos patriarcales de otros, o de distinguir las distintas violencias ejercidas por unos agentes antropocentristas de otros, creo que estamos en condiciones de aceptar simetrías entre naturalezas humanas y no humanas, que valoren sus potencialidades y sus contribuciones a la creación de territorios de vida. El término naturalezahumananatural añadiría condiciones afirmativas a la inclusión de lo humano en el entramado de naturalezacultura.
3
GRADOS COMO MASTERS>>MASTERS>>COMO DOCTORADOS>>Y DOCTORADOS COMO GRADOS Y ASI SUCESIVAMENTE: COSAS DOCETES Y UNIVERSITARIAS QUE IMPORTAN
En distintos momentos y en distintas conversaciones académicas he intentado explicar cómo podría ser un recorrido alternativo al transcurso lineal que empieza en el grado y termina en el posgrado y en la tesis, previo todo ello al ejercicio profesional. La imagen más cercana a lo que propongo como sustituto de los recorridos lineales actuales tendría que ver con introducir protocolos procedentes de la teoría de la economía circular en el medio académico. Compartir, reutilizar, reciclar, reparar, como una suerte de tiempo continuo que enmaraña y confunde los tiempos lineales y continuos pautados por la autoridad académica y por los planes de estudio. Compartir, reutilizar, reciclar académicamente podría suponer establecer entrelazados entre niveles académicos de modo que cada uno de ellos no sea un punto y aparte respecto del otro sino su continuación/transformación, en el que cada estadio no sea un producto originario y autónomo.
No niego la dificultad del intento. Si fuera fácil ya estaría hecho ( El cambio necesario es tan profundo que nos decimos que es imposible. Tan profundo que nos decimos que es inimaginable. Pero lo imposible está por venir. Y lo inimaginable es merecido. Paul B. Preciado) Tampoco obvio las negativas radicales a aceptar esta circularidad en la que un ignorante puede enseñar a un ignorante ( J, Ranciere), o las dificultades para implementar situaciones en las que un estudiante de grado puede completar el trabajo de un arquitecto en su posgrado. Pero ese devenir circular es lo que ya sucede realmente en los procesos naturales (Metamorfosis, Emanuele Coccia 2021) en los que nada se produce ex novo, sino que las cosas y los entes son elaboraciones, colaboraciones, interrelaciones vivas entre partes diversas construyendo en su conjunto una comunidad de prácticas. ¿Por qué no debería ser así en la universidad?
Este entrelazamiento, enmarañado y complejo, es un reto cósmico y real para unas universidades como las nuestras, tan estratificadas y laminadas en su destino empresarial. Probar su viabilidad, construir esos insólitos y desconocidos protocolos, aceptar su condición queer y experimental, aceptar trabajar en el error, en las sombras, en los remix y en la confusión, entre los virus de lo que dábamos por conocido y validado como “bueno”, es uno de los retos más fascinantes que a mi entender tiene frente a si la Universidad y los estudios universitarios.
EPILOGO PROVISIONAL. Dos notas
Los tres enunciados anteriores podrían inducir a formular un par hipótesis provisionales, insertas en ese fluir de enunciados enmarañados.
1 La apreciación de B. Latour …””el nuevo régimen climático no tiene institución compartida” nos dio pie a pensar en las practicas arquitectónicas ecologizantes como el punto central de la tercera institución: lo ecologizante instituyéndose en comunidad de ese territorio vivo que está por venir.
Hablar de la tercera institución tiene un especial sentido en el espacio académico. Un objetivo central es construir otro tipo de recorridos y de acumulaciones para que lo uno y lo otro soslaye y vaya más allá continuamente de la tentación de la repetición, la ortodoxia, lo normativo delo instituido. Tal vez sean las instituciones culturales más heterodoxas ( bienales, festivales museos, galerías de arte, centros de investigación….los responsables de su creación y desarrollo). Esta propuesta abre una discusión/acción/ entre lo institucional y lo anárquico libertario, absolutamente imprescindible en ese momento para poder funcionar contra los designios neoliberales y empresariales de la universidad tradicional.
4.2 Si hay un lugar donde esta interdependencia existe y este enmarañamiento es real es en el jardín planetario tal como ha sido concebido por Gilles Clement. Atenderlo y entenderlo contribuiría a ayudarnos a reformular el sentido de la belleza y de una cierta felicidad naturalezahumananatural. Este proyecto forma parte de lo que propuse en la Facultad de Montevideo como agenda de trabajo y que tendría que ver con la inclusión de la Cultura del Proyecto en la Cultura de la Tierra
Jose M Torres Nadal. Alicante y Girona Mayo 2022